Algo anda mal si leíste que estaba a 500 m de la estación y estas hace 2 horas caminando buscando el puto hostel. Lo cierto es que si estaba a 500 metros y yo preguntando a la gente del lugar me perdí demasiado. Bien. Llegué. Hago el check in y salgo a recorrer peeeeero el tipo de la recepción vuelve en 1 hora. Bueno, ya fue. Aguanto esta hora y si el tipo llega a las 4, a las 4 y 10 estoy paseando.... NO. El tipo, como yo soy argentino, me empezó a mostrar cosas de Clarin y de las Malvinas. Salí a recorrer 17:35.... Venezia es hermosísima. A diferencia de otros lugares no es tan importante (en mi opinión, que no es humilde sino orgullosa de sí misma) el llegar a tal lugar o tal edificio, sino el encontrarte en una vereda con agua al lado tuyo y tener una vista del cielo bellísima.
Por los horarios de trenes a Viena (Venezia - Viena - Praga) tuve que quedarme todo un día más en Venezia. Caminé 9 horas seguidas (estoy cansado mamá) y cuando faltaba una hora para ir a buscar la valija decidí parar e ir a sentarme cerca del hostel. Me llego a perder y se me hace tarde.
Venezia tiene algo que no tiene ninguna ciudad de las que conocí hasta ahora: Es imposible volver a un lugar que te gustó. Si viste un lugar y decís: "Ah, voy a volver más tarde" Cagaste macho. Nunca lo vas a encontrar. En Venezia caminás y caminás y sentís que te alejaste un montón de tu lugar anterior y hacés dos pasos más y volviste. En Venezia no hay mapa que sirva. Y eso es lo lindo de esta ciudad!
Fin de Italia: Roma sos hermosa, me hiciste mojarme de tan linda que sos.
Florencia.... Tu gente me trató mal, no me escupió pero así lo sentí y por eso me mojó.
Venezia, tus calles inundadas llenaron de agua mis humildes PERO NOBLES! zapatillas de lona.
Italia, me mojaste.
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